miércoles, 30 de junio de 2021



Una experiencia viverista en México



Con 25.000 hectáreas de producción el consumo interno mexicano de plantas vivas y de ornamentales ha sido estimado en cerca de $300 millones de dólares anuales, frente a Colombia, mercado que puede alcanzar los $60 millones anuales. Durante los días 13 al 20 de noviembre de 2021 realizaremos la tercera misión al viverismo y la producción de ornamentales en México, en el contexto de la Feria Ornamental Plants & Flowers, iniciativa con la que buscamos fortalecer la capacidad competitiva de los participantes con una visita guiada a uno de los más estructurados centros de producción de plantas vivas en América Latina.


La visita incluye incluye el Mercado de Xochimilco, lugar en donde tradicionalmente los habitantes de Ciudad de México han comprado plantas vivas y productos ornamentales, así como el Parque Temático Jardines de México y el clúster viverista del Estado de Morelos que concentra una gran parte de la operación de producción y comercialización del país, tanto para el mercado interno como para atender una creciente demanda exportadora. 


De toda la agenda vale la pena resaltar la visita al modelo comercial de la Concentradora Nacional de Plantas Ornamentales, Conaplor, organización que cuenta con 3 empresas bajo la figura de Producción Rural de Responsabilidad Limitada, enfocadas en la comercialización, el crédito para sus socios y el suministro de insumos. Conaplor fue conformada en 1999 por 83 socios productores de la región de Cuautla y sus modernas instalaciones fueron levantadas en un terreno de 7 hectáreas exclusivamente dedicadas a la exhibición y la comercialización de los productos de los socios fundadores. El enfoque comercial asociativo les ha permitido a los socios atraer compradores de todo el país para nutrir la cadena nacional de plantas y ornamentales, dado que en un sólo sitio encuentran todos los productos y todas las cantidades requeridas. 


“De toda la agenda vale la pena resaltar la visita al modelo comercial de la Concentradora Nacional de Plantas Ornamentales, Conaplor, organización que cuenta con 3 empresas bajo la figura de Producción Rural de Responsabilidad Limitada, enfocadas en la comercialización, el crédito para sus socios y el suministro de insumos”.


Atlacomulco a su vez ha consolidado en sólo dos décadas otro de los más exitosos centros de producción y comercialización de plantas vivas y de ornamentales del país. El modelo asociativo en el que participan actualmente unos 200 productores ha permitido el desarrollo de un clúster que atrae compradores principalmente del norte de México. Aunque no es evidente un importante desarrollo técnico, la experiencia compartida les ha permitido enfrentar condiciones climáticas adversas y generar un modelo comercial asociativo muy importante.


Mayor información: Atención al Afiliado - (311) 572 8488 - info@colviveros.org


La variante Delta del Covid-19

El Covid no se ha ido y por el contrario, la aparición de la variante Delta confirma la mayor capacidad de contagio de la enfermedad por lo que no debemos relajar las medidas de prevención. Esta variante, identificada en la India, se considera hasta un 60% más transmisible que la variante Alfa detectada en Inglaterra, la cual a su vez se dice ha sido hasta un 50% más contagiosa que la cepa inicial. 


En palabras sencillas, la variante Delta tiene mayor capacidad para multiplicarse por lo que debemos extremar las medidas de bioseguridad tanto en nuestros negocios como en nuestras casas. Recordemos que el virus ha implicado ya la muerte de más de 105.000 colombianos.


Atentamente,




Jairo Cadavid Ossa

Presidente

Colviveros


Volver al Boletín...


 Mil Mesetas, entre café y bromelias


Milmesetas S.A.S. es una empresa localizada en Pasca, Cundinamarca, que está escribiendo una nueva historia para la finca de una familia y la comunidad de su entorno. Para Diego Benavides su gerente, más que un proyecto agrícola es un conjunto de vivencias buscando una agricultura amigable con el medio ambiente, una experiencia de campo en relación orgánica con todos los seres. “Somos un vínculo directo entre su casa y la tierra, una tierra que habitamos y queremos compartir”, enfatiza el asociado de Colviveros.


¿Cómo se concibió este proyecto integral que involucra producción de café orgánico, con bromelias en maceta y heliconias como flores de corte?

Ha sido un proceso en el que hemos venido transformándonos. Inicialmente, hacer un tránsito de una agricultura más o menos intensiva de producción de alimentos, a una más sustentable, llevábamos más de 40 años cultivando comida. Evidenciábamos en la zona y en nuestra propia tierra un particular agotamiento. Si bien sembrar comida es una necesidad, estábamos contra las cuerdas, nos enfrentábamos a créditos caros, precios bajos y el estrés por mantener las dinámicas de producción de este tipo de cultivos. 


Por el año 2007 decidimos que se necesitaba un cambio, que no podíamos continuar como veníamos, que debíamos cambiar el espíritu de la finca. Primero fue el café, esto implicó sembrar un bosque y de alguna manera restablecer un vínculo con la tierra, luego vino el cultivo de la Strelitzia reginae o ave del paraíso, un cultivo de un carácter más perenne, estable. También en el área de invernadero donde sembramos tomate alguna vez, establecimos un cultivo de Ruscus que luego dio paso al de bromelias. Con las bromelias llevamos un poco más de 10 años, en los que hemos venido fortaleciendo un amor por estas plantas, conociendo sus detalles y proceso de cultivo. 


Otro elemento relevante fue constituirnos como empresa y comenzar a trabajar en los compromisos y las ventajas que esto implica.


¿Otros aspectos importantes del proceso tienen que ver con la recuperación de bosques y suelos?

Efectivamente, podemos decir que desde el inicio el proyecto se concibió con una vocación orgánica. Cambiar el espíritu de la finca significaba, poner como prioridad un proceso de recuperación que contemplase varios aspectos integrales. Por un lado, dejar el uso de productos que hiciesen daño al suelo, al agua y a otros seres e implementar prácticas amigables, y por otro, recuperar el paisaje. Sembrar el bosque para el café fue el primer paso en este aspecto. 


Ha sido un trabajo lento, de paciencia, de contemplar y atender los ritmos de la misma naturaleza, poco a poco los árboles crecieron, llegaron aves que nunca habíamos visto así mismo todo nuestro ecosistema cambió, ahora todos trabajábamos en un espacio más sano. En este proceso continuo hay muchos aspectos en los que seguir trabajando, pero vale la pena.


¿Quiere decir entonces que Mil Mesetas en un ejemplo que demuestra que la producción agrícola puede generarse en armonía y equilibrio con la naturaleza?

Es nuestra apuesta, no ha sido fácil, pero es necesario. No solamente es luchar por necesidades inmediatas, sino pensar también a largo plazo, en un legado para nuestros hijos y el derecho de todos los seres de poder convivir en esta tierra. Si bien es difícil, hay que trabajar con esa ruta en mente, como humanos, creemos, somos muy resistentes y podemos sobrevivir en entornos muy agrestes, pero sería un pena encontrarnos en algún momento solos, sin la compañía de plantas o animales, de otros seres.


¿Desde su perspectiva, hacia donde va el viverismo nacional?

El viverismo puede hacer parte del ADN nacional, somos privilegiados al convivir en un territorio con una gran diversidad. Así mismo esto implica una importante responsabilidad, de cuidado, de preservación, de relación sustentable con el entorno. Debemos fortalecer un viverismo consciente de estos aspectos, en compañía de investigación local, fortaleciendo vínculos con otras áreas, permitiéndonos conocer mejor lo que tenemos. Entre más conocimiento haya de nuestro entorno, entre más nos eduquemos sobre especies nativas, podremos entre otras cosas educar a los clientes sobre la importancia de cuidar y propagar estas plantas. Además posiblemente permita diferenciarnos con productores de plantas de otras regiones del planeta.


¿En momentos tan complejos, cómo esperan aportar al desarrollo colectivo del viverismo y de la producción de ornamentales en Colombia?

Recientemente estamos vinculándonos a la comunidad del viverismo, una comunidad que tiene una importante historia.  Esperamos poder compartir parte de nuestra experiencia, de nuestras motivaciones, fortalecer nuestro entorno inmediato, pero también el territorio, la comunidad. Este país está creciendo a grandes pasos, hay una explosión demográfica que debe invitarnos a pensar en su impacto en el entorno y como el viverismo es también conservación, desde este sector podemos aportar un grano de arena.





Diego Fernando Benavides

+57 (320) 233 1398

contacto@milmesetas.com

https://https://www.milmesetas.com



Volver al Boletín...



Hablemos de Valor Compartido

















foto: Laregion.es

En estos convulsionados días cobra vigencia este concepto acuñado por Michael Porter, uno de los más revolucionarios académicos estadounidenses, reconocido por sus brillantes teorías económicas. El valor compartido se centra en identificar y fortalecer la conexión entre el progreso de las empresas y el desarrollo de las comunidades de su entorno, ante la premisa de que generar valor en las empresas no debe excluir la generación de valor para la sociedad.


El valor compartido redefine la visión de las empresas al conectar mejor el éxito de las mismas con las necesidades de la sociedad, para generar muchas formas de atender nuevas necesidades, incrementar eficiencias, crear diferenciación y expandir mercados. El viverismo nacional cuenta con avances interesantes de empresas que por ejemplo han reestructurado las rutas de distribución de sus camiones, con lo cual no sólo han logrado ahorros en costos, sino que han disminuido las nocivas emisiones de carbono, o aquellas que invierten en programas de formación y bienestar que generan empleados más saludables y comprometidos, a la vez que reducen las ausencias laborales y las pérdidas de productividad.


¿Y usted qué está haciendo desde la perspectiva de valor compartido?



Volver al boletín...

 

Una experiencia viverista en México Con 25.000 hectáreas de producción el consumo interno mexicano de plantas vivas y de ornamentales ha sid...